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En las
páginas de Bandera Roja hemos animado las luchas de la clase trabajadora en sus
diferentes sectores en los últimos años. Es para nuestra organización de mucho
agrado poder llegar a nuestra edición 100, porque ha sido un trayecto largo que
sin duda ha valido la pena.
El camino recorrido
Con
esta publicación tratamos de expresar, mes a mes, la voz de ánimo para la clase
trabajadora, apelando a la rebelión consciente de quienes en silencio hacemos
andar el mundo con el sudor de nuestra frente. Pero la clase de poseedores y
millonarios bombardea a las clases populares con SU prensa, con SU punto de
vista y por la defensa de SUS privilegios. Con su publicidad nos meten la falsa
idea de que las cosas siempre han sido así, que la economía es “algo complicado”
y que la política es para la gente de “mucho estudio”.
Bandera
Roja nos señala que no habrá solución de fondo a los males que aqueja la
sociedad, hasta que sea la clase trabajadora la que dirija la producción, la
cultura y la educación. Nuestro periódico se ha convertido así en un medio para
auto-educarnos políticamente. Somos de la opinión de que “la emancipación de
los trabajadores será obra de los trabajadores mismos”.
Pero
más que un simple medio de comunicación alternativo, Bandera Roja ha sido una
herramienta para la lucha. Nuestro periódico estuvo allí donde ha hecho falta,
en concentraciones, asambleas, marchas y huelgas… exponiendo es sus páginas
cual es la mejor manera de salir adelante. El Bandera Roja es una herramienta
para el trabajo de hormiga necesario para cambiar las cosas en favor de los que
más sacrificamos y menos recibimos en un mundo obscenamente lleno de lujos,
obscenamente desigual. Entonces, más que unos papeles con tinta, Bandera Roja
es una herramienta para la organización.
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Ya
nuestra publicación cuenta con una base de lectores permanentes en diferentes
sectores, sin embargo, en este 2014 queremos ampliar su distribución a través
de una campaña de suscripciones anuales.
Nuestra
primera meta es pequeña, pero ante la cual necesitamos su colaboración. Estamos
suscribiendo a las y los lectoras/es permanentes de Bandera Roja, y así iniciar
un listado de las personas que desean recibir el periódico en su casa o centro
de trabajo. Con el pago de la suscripción se está cubriendo el costo de la
publicación y de otros suplementos (como
“La Chispa”), así como los costos de envío. Las y los lectoras/es de
Bandera Roja al suscribirse colaboran con el monto solidario a sostener el tiraje
por muchas más ediciones. Además cada lector/a tendrá garantizada la llegada
del Bandera Roja por un año, y darle seguimiento.
Para
nuestra organización es importante el apoyo económico porque así podemos
continuar realizando giras a diferentes comunidades del país, así como para
impulsar actividades políticas y culturales que realizamos en apoyo a los
campesinos sin tierra; etc. La retroalimentación entre militantes y lectoras/es
de nuestro Bandera Roja ayuda a mejorar la redacción, el diseño, la distribución
y venta del mismo.
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