viernes, 4 de agosto de 2017

Por el derecho a la libre sindicalización en el sector privado

Rodear de solidaridad a las y los trabajadores de la piña ante los despidos ilegales y las deportaciones ilegales en Finca La Nenita



Casi al mismo tiempo que el gobierno anuncia, con bombos y platillos, acompañado y respaldado por la “izquierda responsable” de la cúpula del Frente Amplio y las burocracias de los principales sindicatos reformistas del país, la entrada en vigencia de la Reforma Procesal Laboral; el empresario Wilberth Nautilio Gómez Rojas, dueño de la empresa Nenita Farm, despidió el pasado sábado 29 de julio, aunque de manera ilegal, al 90% de la planilla de los trabajadores de dicha empresa como represalia por haberse sindicalizado y haber conformado una seccional del Sindicato de Trabajadores del Sector Privado (SITRASEP). Esto pone en evidencia que, a pesar de los cantos de sirena de los sectores reformistas que invitan a la clase trabajadora a confiar en el gobierno y la burguesía, la clase trabajadora solo puede confiar en sus propias fuerzas y en sus organizaciones autónomas para conquistar derechos y dar luchas laborales y políticas. 

La lucha por los más elementales derechos laborales de las y los trabajadores de la piña pone en evidencia la falacia de las libertades democráticas costarricenses, pues es claro que en la mayoría de los casos los derechos de la clase trabajadora dejan de existir una vez que cruzan la puerta de la fábrica, finca o empresa. El derecho a la libre sindicalización, al salario mínimo, a los días de descanso son letra muerta cuando el gobierno pone a la fuerza pública al servicio de los grandes empresarios y terratenientes para violar los derechos de la clase obrera. 

El caso en cuestión es un buen ejemplo: El empresario Gómez Rojas actúa al margen de la ley, despide a los trabajadores sindicalizados sin ningún tipo de justificación, luego contrata matones a sueldo para que impidan el ingreso a la finca de los trabajadores sindicalizados (probablemente para después intentar acusarlos de abandono de trabajo) y les informa que solo podrán ingresar a la finca a laborar aquellos trabajadores que no se hallan afiliado al sindicato los trabajadores. No solamente son despedidos sin ningún tipo de justificación y notificación, sino que se les impide presentarse a laborar con efectivos de seguridad privada; son engañados, porque se les convoca para pagarles la indemnización y en realidad son abordados por un operativo de la fuerza pública, que en acuerdo, tácito o no, aprovecha para deportar a trabajadores por estar “de forma ilegal” en el país. No había problema de su condición migratoria irregular mientras esto era aprovechado por el patrono piñero para pagar salarios por debajo del mínimo y evadir obligaciones patronales, como el pago del seguro de salud y de riesgos del trabajo entre otros, aprovechándose de la condición vulnerable de las y los trabajadores migrantes; pero basta que el trabajador levante su voz para exigir sus derechos básicos para que en contubernio con el gobierno y la policía el trabajador se transforme de la noche a la mañana en un paria que puede ser expulsado del país sin asco y sin ningún tipo de contemplaciones. 

El día de ayer fueron expulsados tres trabajadores de la empresa Nenita Farm del país con el apoyo de la policía y funcionarios de migración.El día de hoy la Sala IV le da la razón a SINTRASAP, de que los trabajadores no debieron ser expulsados del país; consideramos fundamental, por tratarse del sector más vulnerable, que todas y todos los trabajadores extranjeros sean reconocidos como trabajadores con derechos, que se les otorgue permiso de trabajo y cédula de residencia. 

En el Partido Revolucionario de las y los Trabajadores (PRT) nos solidarizamos con los trabajadores despedidos de la empresa, repudiamos las acciones ilegales del empresario Wilberth Nautilio Gomez Rojas y la colaboración del gobierno costarricense (por acción u omisión) en tan lamentable espectáculo y hacemos un llamado a todas las organizaciones sindicales y políticas para rodear de solidaridad con esta lucha y evitar que los crímenes en contra de la clase trabajadora del sector piñero quede impune. La lucha de las y los trabajadores de la piña es un ejemplo del camino a seguir por la clase trabajadora costarricense, por eso no puede quedar aislada; en este momento es fundamental que todas las organizaciones sindicales y políticas, sobre todo los grandes sindicatos del sector público ‒como los magisteriales‒ se movilicen de manera urgente para exigir el derecho a las libertades sindicales básicas para las y los trabajadores del sector piñero. 

Nos sumamos a la convocatoria realizada por Sitrasep para realizar una reunión lo más amplia posible el próximo martes 8 de agosto a las 6:00 p.m. en el Sindicato de Empleados de la Universidad de Costa Rica (SINDEU) para coordinar las próximas acciones de lucha. 

Ninguna confianza en los patronos y sus organizaciones
Solo podemos confiar en las organizaciones de la clase trabajadora
Por el derecho a la libre sindicalización
No más despidos y no más deportaciones ilegales en el sector piñero 


Partido Revolucionario de las y los Trabajadores 4 de agosto

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